¿Que sabes realmente acerca de la Cirugía Plástica?



Es por todos conocido el auge que ha tenido la Cirugía Plástica en estos últimos años; las actividades sociales, laborales, es decir, nuestras relaciones, exigen en lo posible que la capacidad intelectual vaya acompañada de un rostro o una figura fresca, lozana, reluciente para poder competir en el mundo actual.

No existen secretos en la especialidad, las técnicas clásicas y más actuales están al alcance de todos, la diferencia está en el criterio, juicio estético y concepto de belleza que cada cirujano posee y en aplicar una u otra técnica en virtud de cada persona.

Para la mayoría de los cirujanos la intervención es como un plano acabado, todo está allí realmente claro, cada gesto llega en su momento, mesurado y exacto, sabedores del objetivo final; la prudencia va unida a una fría audacia que cuenta siempre con la seguridad. Hay cirujanos constantemente afortunados, se dice que tienen suerte, esa suerte no es más que el efecto de una indicación bien planteada.

El humanismo, base moral de la medicina y cirugía, nos obliga a conocer nuestros límites y a no sobrepasarlos; un “no” reflexivo no es nunca una humillación. Es preciso que la cirugía conserve la preocupación de lo humano y que el cirujano siga siendo el servidor comprensivo y respetuoso del paciente.

Sin embargo hay médicos sin escrúpulos, con fines lucrativos, con montajes publicitarios en su mayoría falsos, que desdicen de la ética profesional, que ofrecen en muchos casos resultados sin tener capacidad suficiente o experiencia necesaria y aún siendo de otras especialidades realizan cirugías estéticas.

Lamentablemente, los pacientes son engañados cayendo en manos de este tipo de profesionales, con los consiguientes problemas posteriores que ésto acarrea y complicaciones que no tienen capacidad de resolver.

El embellecimiento facial y corporal no pueden ser entregados a cualquiera, la persona que lo solicita debe saber y estar en pleno conocimiento de todo lo que se le va a realizar; del sitio donde se realiza el procedimiento, que debe ser adecuado y con todos los elementos técnicos disponibles para utilizarse ante una eventual necesidad.

Debe ser conocedor de sus posibles complicaciones y el cirujano debe estar capacitado para actuar y resolver cualquier imprevisto en el caso de que pueda presentarse, y no solamente en lo referente a la cirugía estética. Es de dominio público los casos que suceden no solo en nuestro medio sino en el mundo en general y que no han tenido un final feliz.

Hay que pensar que nuestras decisiones pueden tener consecuencias, así que debemos obligarnos a buscar siempre el mejor resultado. Sólo cuidando estos aspectos y gozando de la confianza de nuestro paciente al final tendremos un amigo y paciente agradecido y un cirujano que ha sabido cumplir con su papel como médico y su papel ante la sociedad.

Deseo a través de este Blog, Estética Práctica, podamos establecer una comunicación fluida de información, no solo de cirujano hacia vosotros, sino que vosotros podáis transmitirnos vuestras opiniones y dudas acerca de cualquier tema relacionado con nuestra especialidad.

Saludos cordiales

Dr. Isidro Sesma