¿Por qué elegir la técnica F.U.E. en un trasplante de cabello?

La historia del trasplante de cabello se inicia como tal en el año 1939, cuando un dermatólogo japones describe una técnica en la cual utilizaba unos punch de 2 a 4 cm de diámetro para la extracción de piel con cabellos de cuero cabelludo, que posteriormente trasplantaba en la zona calva. En 1959 Orentrich demostró que los cabellos trasplantados conservan en la zona receptora idénticas características a la región de donde proceden, un gran avance en el conocimiento de las unidades foliculares. Posteriormente llegó el cabello sintético que fue un rotundo fracaso y los famosos "punch" de los años ochenta los cuales daban un resultado antiestetico.
 

Mas adelante surge una revolución con "la técnica de la tira", donde se extraía de la parte posterior de la cabeza una tira de cuero cabelludo para posteriormente individualizar las unidades foliculares y trasplantarlas. Las cicatrices antiestéticas, el postoperatorio molesto, la imposibilidad de llevar pelo corto y la licitación en cuanto al numero de intervenciones hizo surgir una nueva técnica que evitara todas estos efectos adversos.
 

La técnica F.U.E. (Follicular Unit Extraction), o la Extracción de las Unidades Foliculares, se desarrolla en Australia por los hermanos Woods, por el Dr. Cole en USA y por DHI en Grecia, desde hace unos años en Estética Práctica venimos desarrollando esta innovadora técnica de trasplante capilar con resultados realmente satisfactorios. El fundamento de la técnica consiste en extraer una a una las unidades foliculares mediante unos microbisturís de titanio, para posteriormente trasplantarlos en la zona receptora mediante un aparato llamado Implanter. El fin ultimo de la técnica es evitar las cicatrices inestéticas, hacer mas confortable la cirugia, eliminar el postoperatorio y por supuesto ofrecer unos mejores resultados.
 

Practicamente sin efectos adversos, las ventajas son obvias

• No hay cicatriz, por lo tanto no es necesaria la retirada de suturas, no existe postoperatorio, al no existir cicatriz, el paciente puede llevar el pelo corto si lo desea.

• Tanto la zona donante como la receptora se recuperan rápidamente, en unos días los microorificios ya están prácticamente cicatrizados.

• Existe la posibilidad de extraer Folículos de otras zonas corporales, tórax, espalda, barba, pubis, extremidades inferiores, mientras que en la técnica clásica no existe esa posibilidad.

• Se extraen las Unidades Foliculares necesarias para cada caso, dependiendo de las planificaciones que hagamos, es una cirugía “a la carta”. En la técnica de la “tira” nunca sabemos el número de Folículos que vamos a disponer.

• Nos permite seleccionar el tipo de cabello mas adecuado, podemos elegir unidades de 1, 2, 3 y 4 cabellos dependiendo de la zona a repoblar,

• La anestesia es local.

• No hay necesidad de apósito o vendaje.

• No hay alteración de la sensibilidad en la zona donante, mientras que en la técnica de la “tira”, la cicatriz resultante del área donante es extensa, el postoperatorio es molesto y pueden surgir problemas de cicatrización.

• Hay una menor manipulación de las unidades foliculares, el control y cuidado de los folículos es máximo, por lo tanto una tasa menor de fracaso en el trasplante de cabello.

• El uso del Implanter en vez de la tradicional pinza, hace que la herida resultante sea mínima, con una cicatrización mas rápida, evitando complicaciones infecciosas.

• No es necesario esperar 1 año entre las sesiones, a los 5 meses podemos planificar otro trasplante de cabello.

• El paciente decide cuantos folículos se pone por sesión, o bien si quiere hacerlo en varias fases.

No cabe duda que la implantación de esta técnica nos ofrece los mejores resultados, sin efectos secundarios ni adversos y sobretodo ventajas hasta ahora impensables con la técnica de la tira. En Estética Práctica y el Centro Sanitario Virgen del Pilar la ponemos a su disposición, con ella obtenemos los mejores resultados posibles, siendo un procedimiento en el que se elige con exactitud el numero de Folículos y sesiones necesarias, evitando las cicatrices innecesarias y los postoperatorios incómodos.
 

Saludos cordiales
Dr. Isidro Sesma