Cómo mantener un cabello sano


El cabello es un ornamento que resulta esencial para lucir un buen aspecto, de ahí que el preservarlo y embellecerlo haya sido una tarea constante desde la antigüedad. Los hombres y mujeres han alabado este adorno natural y han tratado de aumentar su atractivo mediante los cortes, teñidos, cardados, rizados, alisados, empolvados, engominados, etc., unas veces para identificarse con un ideal social y otras para ser únicos o diferentes.

Los egipcios fueron los primeros en considerar el cabello como elemento de seducción, se aplicaban tintes, grasas, se recortaban la cabellera o bien usaban pelucas de lana o pelo natural. Los griegos sin embargo preferían melenas largas con rizos y adornos que embellecían la cabeza. Los romanos gustaban de pelo recortado mientras que las damas aclaraban su pelo y lo recogían alrededor de la cabeza. Ya en el barroco, la peluquería pasó a ser un arte e incluso una ciencia. La historia, el arte y la literatura demuestran que el ser humano ha alabado siempre este ornamento natural y ha tratado con empeño no solo de mantenerlo sino de aumentar su atractivo.

La importancia social del cabello como componente estético esta clara, pero además el cabello cumple una función fisiológica importante, que es la de protegernos de los agentes externos, así que combatir la caída del cabello es una acción prioritaria, hoy en día disponemos de productos contrastados como el Minoxidil, Finasteride, Dutasteride y Factores de Crecimiento que detienen e incluso revierten el proceso de miniaturización del cabello.

Cuidar el cabello
Hay factores ambientales que dañan la salud de nuestro cabello, sol, agua del mar, cloro, viento y polución ambiental. Hay sustancias medicamentosas que sus efectos secundarios dañan el cabello, los anticonceptivos, antibióticos, antiinflamatorios, la cortisona, alteraciones de la glándula tiroides, el estrés, las dietas sin asesoramiento cualificado y las alteraciones hormonales.

Los champús son utilizados para eliminar la suciedad, exceso de grasa, descamación y partículas contaminantes ambientales que se acumulan diariamente en el cabello, el Ph deberá ser ligeramente ácido para preservar la queratina del cabello y no abusar en sus concentraciones de agentes tenso activos o surfactantes, que son los que precisamente lo hacen más irresistible al consumidor, abundante espuma, bonito color y agradable olor, lo cual expresa su agresividad en su composición. 

El Lauril Sulfato de Sodio es un componente dañino frecuente en los champús, descompone la proteína esencial del cabello y detiene su crecimiento, si a eso asociamos un acondicionador, acrecentamos su agresividad, los acondicionadores contienen siliconas que sellan la cutícula del tallo piloso, impiden su deshidratación pero son un residuo mas en nuestro cuero cabelludo que harán que precisemos de surfactantes para eliminarlas, por ello la importancia de usar acondicionadores que incorporen siliconas hidrosolubles, como PEG Dimeticonas, las cuales se retiran fácilmente con un aclarado sin necesidad de surfactantes.

Qué duda cabe que algunos champús llevarán asociados sustancias fungicidas, antibióticos o corticoides para tratar algunas patologías de cuero cabelludo, existe la creencia errónea que las vitaminas y aminoácidos que se añaden al champú son efectivas, pero en realidad son un reclamo publicitario sin ninguna utilidad.

Por desgracia muchos champús incluyen en su formulación sustancias como los Polietilenoglicoles, otros Parabenos que son utilizados para prolongar su vida útil, otros causan irritación como los que contienen Dietanolamina y Trietanolamina, Fragancias y Colores artificiales, los Propilenoglycoles son utilizados como conservantes pero dañan la estructura del cabello. Lacas, geles y productos similares pueden tener alto contenido en Alcoholes que dañan la salud del cabello.

Los tintes contienen sustancias irritativas como el Amoniaco, Resorcinol, PPD (parafenilendiamina) y Agua Oxigenada, causantes de reacciones alérgicas, alteraciones del cuero cabelludo y favorecedores de la perdida de cabello, lamentablemente estamos colaborando al maltrato de nuestro cabello.

La importancia de entender que el cabello es una parte importante de nuestra imagen, mantenerlo es posible, cuidarlo debe ser una tarea diaria que no precisa de mucho tiempo, pero si será necesario prestar atención para evitar champús y acondicionadores que incorporen sustancias que lo dañen, evitar siempre que posible la utilización de secadores, planchas de pelo y rizadores que deterioran el cabello y  los peinados apretados que estiran el cabello y pueden romper la raíz.

Saludos cordiales